Inspirada en hechos reales, Chopper, primer largometraje de Andrew Dominik, narra la vida de Mark «Chopper» Read, un famoso criminal australiano que durante los años 80 y 90 se situó en el punto de mira de la policía. El delincuente no tuvo una infancia fácil, desde pequeño soñó con convertirse en el enemigo público número uno, alguien del que se hablase en los periódicos. A los dieciséis años preparó un ataque contra el juez, pero éste logró salir con vida y Chopper fue detenido. Una vez en prisión, protagonizó diversos altercados con el resto de reclusos, ganándose una gran reputación en el mundo de la delincuencia. Su comportamiento autodestructivo le llevó a provocar multitud de peleas, siempre actuando en contra de las reglas de la cárcel. Después de 8 años, fue liberado, pero su actividad delictiva no cesó. Fue sentenciado por distintos tipos de crímenes, incluyendo robo a mano armada, asalto y secuestro. A lo largo de sus veintitres años encarcelado escribió sus memorias, en las que relata sus diecinueve asesinatos. Más tarde se convirtió en un escritor de éxito, llegando a vender aproximadamente 500.000 copias de sus obras.